Un objeto que asusta, una llave que simboliza penetración. Solía reírme de la idea de poder que significa dicho objeto. Los griegos hablaban de la llave de la vida, yo me pregunto hoy porqué la copia de la misma no arrastró ritual. tengo ahora en mis manos lo que te penetra y sin embargo, pregunto cuándo. quizás necesite escupirla, mancharla o tal vez, perderla para sentirla mía. ocupa un espacio que es mío y lo penetra, lo abusa, lo hace suyo. Duerme entre mis llaves creyéndose dueña de algún rincón que me tenga de protagonista. Deberé domarla y obligarla a mis placeres, sólo así será mía.